Bajo la lupa: tres proyectos aeroportuarios del Caribe que permanecen en el limbo

Los planes de tres iniciativas aeroportuarias para la región del Caribe, todas ellas con inversiones privadas, se retrasaron debido a decisiones gubernamentales y la pandemia.

Los proyectos siguen en compás de espera, pero podrían subastarse rápidamente o sus obras podrían reanudarse si hay voluntad política.

BNamericas echa un vistazo a estos trabajos.

El futuro del aeropuerto de US$200 millones sigue en el limbo luego de que el Tribunal Superior Administrativo (TSA) apoyara a la autoridad de aviación civil, IDAC, en su decisión de suspender el proyecto que se adjudicó a Grupo Abrisa.

Las obras comenzaron en septiembre de 2020, después de que el expresidente Danilo Medina aprobara la construcción mediante decreto ejecutivo. Sin embargo, bajo la administración de su sucesor, Luis Abinader —quien asumió en agosto de 2020— IDAC suspendió el proyecto porque las obras violaban «los principios, normas y procedimientos establecidos en el ordenamiento jurídico vigente, lo cual justifica su nulidad».

Desde entonces, la empresa que se consolidó para gestionar el aeropuerto, también llamada AIB, ha intentado reactivar el proyecto. La instalación podría ser la tercera en la zona este de República Dominicana. Sin embargo, todos los niveles de gobierno, incluido el Poder Judicial, rechazaron la iniciativa.

En febrero, TSA desestimó un recurso presentado por la compañía para revocar la decisión de IDAC.

La defensa de AIB argumentó que la suspensión infringía los principios de la administración pública, ya que IDAC no tenía competencia para decidir sobre un acuerdo firmado entre el gobierno y la empresa aeroportuaria.

Pero los jueces se alinearon con IDAC, reiterando que el conglomerado no ha presentado “los documentos e informes técnicos pertinentes para la continuación de la obra aeroportuaria”. Otro argumento en contra de la terminal aérea es que se está construyendo demasiado cerca, a menos de 50km del actual aeropuerto internacional de Punta Cana. Varias preocupaciones sociales, competitivas y ambientales también están en juego.

BARBADOS: AEROPUERTO INTERNACIONAL GRANTLEY ADAMS (GAIA)

Aunque el gobierno no ha cancelado los planes para otorgar la concesión a 30 años para operar, ampliar y mejorar la terminal GAIA a través de una asociación público-privada (APP), tampoco ha informado novedades respecto del estado del proceso licitatorio, para el cual 13 postores precalificaron en agosto de 2020.

A fines de noviembre, el servicio de información del gobierno (GIS) desmintió los rumores de que el aeropuerto había adjudicado el contrato de APP a China. Luego proporcionó una actualización.

“El proyecto de APP está en fase de procura. Con el impacto de la pandemia de COVID-19 en el sector de la aviación, GAIA ha debido revisar la estructura de la APP. Los 13 postores precalificados recibirán solicitudes de propuestas el primer trimestre de 2022, cuando se haya completado la reestructuración de la operación”, explicó GIS en un comunicado.

En el marco de la asociación, la propiedad del aeropuerto seguirá en manos del Estado y el operador privado solo tendrá derecho a usar sus activos e invertir y expandir la terminal, similar a un contrato de arriendo, durante la duración de la asociación. Los activos del aeropuerto volverán al Estado al finalizar el contrato.

Para elegir un adjudicatario, las autoridades solicitaron los servicios de asesoría de la Corporación Financiera Internacional (IFC).

La incertidumbre también rodea un plan para otorgar una concesión a 30 años para operar y mejorar siete aeropuertos en Islas Out, luego de que el gobierno anunciara que estaba revisando el concurso de licitación.

En junio, el Ministerio de Turismo y Aviación (MOTA) dijo que estaba buscando socios privados calificados para actualizar, operar y mejorar una serie de aeropuertos de las islas con el objetivo de aumentar la llegada de visitantes e impulsar el crecimiento económico. La cartera pretendía lanzar el proceso de licitación el año pasado y adjudicar el contrato el 1T22, pero la licitación aún no se lanza.

En septiembre se produjo un cambio de gobierno, donde Philip Davis sucedió a Hubert Minnis como primer ministro. En octubre, el viceprimer ministro Chester Cooper anunció que el gobierno suspendió el plan de US$400 millones para analizarlo, según el sitio local Eye Witness News.

“Queremos asegurarnos de que lo que se ha hecho es coherente con las políticas de nuestro gobierno. Una vez que hayamos completado nuestra revisión, tendrán más información al respecto”, indicó.

Las terminales incluidas en el programa de APP aeroportuarias son:

Aeropuerto Internacional de Gran Bahama, Freeport, Gran Bahama;

Aeropuerto Internacional Leonard M. Thompson, Marsh Harbour, Abaco;

Aeropuerto Internacional de Exuma, Exuma, Gran Exuma;

Aeropuerto Internacional de North Eleuthera, Eleuthera;

Aeropuerto Internacional de Long Island, Deadman’s Cay, Long Island;

Aeropuerto Internacional de Great Harbour Cay, Islas Berry; y

Aeropuerto Internacional de San Salvador, Isla San Salvador.