Cómo mantener la rutina del sueño en los niños durante las vacaciones
La psicóloga de BluaU de Sanitas, Raquel Velasco del Castillo, advierte de la importancia de mantener unos horarios más o menos fijos que garanticen el correcto descanso de los niños también durante el verano, ya que la falta de sueño puede conllevar una alteración de las capacidades físicas y psicológicas. Tal y como recuerda, con la llegada de la época estival y las vacaciones escolares, los niños comienzan a cambiar de hábitos.
El aumento de las horas de luz y la disponibilidad de tiempo libre para dedicarlo al ocio hace que se pierdan las rutinas, especialmente, en lo que respecta al sueño. «Normalmente, durante la época estival, se realiza una adaptación de las rutinas del sueño de los niños a los horarios de los adultos, y no se suele contemplar que esto, puede tener repercusiones en su bienestar físico y emocional», avisa la psicóloga. «Mantener una rutina equilibrada del sueño en los niños es fundamental para su buen desarrollo», afirma.
Entre las alteraciones emocionales y psicológicas que pueden provocar la falta de descanso, las más habituales suelen ser: dificultad para concentrarse, falta de energía para las actividades diarias, frecuentes explosiones de ira e incluso estados de ansiedad y de tristeza en casos graves. «Dormir bien es tan importante como comer y tanto en el verano como en las vacaciones, debemos seguir manteniendo los hábitos que estaban ya marcados durante el curso escolar», insiste la experta. Así, recuerda que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los niños menores de un año deben dormir de 14 a 16 horas, incluidas las siestas. Los niños de 1 a 2 años, entre 11 a 14 horas; y los niños de 3 a 4 años, de 10 a 13 horas diarias, incluyendo las siestas. Además, este descanso debe ser de calidad y aconsejan mantener una regularidad de horarios tanto a la hora de acostarse como de despertarse.
Fuente: AGENCIAS