¿Eres sonámbulo? Evita las drogas y el alcohol; experto de la UNAM explica porqué
La ingesta de estas sustancias podrían provocar conductas sexuales involuntarias y problemas con la alimentación, mientras la persona se encuentra dormida
El sonambulismo puede presentarse desde la niñez con conductas como hablar dormido, pero estas prácticas indefensas pueden cambiar en la adultez, cuando el paciente puede tender a realizar conductas violentas verbales y sexuales, que lo comprometan legalmente ¿cómo evitarlas?
El sonambulismo es un estado de disociación en el que la persona dormida tiene conductas similares a cuando está despierta, pero de manera inconsciente al encontrarse en una de las fases de sueño más profundas.
Entre las actividades más comunes que pueden realizarse durante el sueño son hablar, comer, llorar y discutir, así como abrir los ojos.
En comunicado de la UNAM, el doctor en biología experimental Ulises Jiménez Correa explicó que cuando una persona padece sonambulismo, en los primeros años de vida, debe evitar el consumo de alcohol y drogas al alcanzar la edad adulta.
El integrante de la Facultad de Medicina (FM) aseguró que la ingesta de estas sustancias podría provocar nuevos problemas de sueño, relacionados con las sexomnia -conductas sexuales mientras la persona se encuentra dormida- y con la alimentación.
El investigador de Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM ha analizado este trastorno en un estudio publicado en “CNS Spectrums”, la revista del Neuroscience Education Institute.
El trabajo consistió en examinar las conductas que se llevan a cabo durante el sueño, también conocidas como parasomnias, en pacientes dependientes de alguna sustancia o durante el tratamiento de una adicción.
La observación se concentró en el movimiento ocular rápido (MOR) ejecutado por los participantes en la investigación, También se tomó en cuenta su reacción durante el llamado “sueño no MOR”.
Jiménez Correa señaló que la abstinencia propició más parasonmnias relacionadas con la conducta violenta durante el sueño y las pesadillas.
Con relación a los episodios de sexomnia, el investigador expresó que los voluntarios se masturbaron, efectuaron gemidos, provocaron moretones en el cuerpo y abordaron a la pareja o persona con la que compartían la habitación.
“Lo que es un problema para quien padece este problema pues puede llevar a serias situaciones legales”, estima en el comunicado.
El experto también aseguró que depende de la etapa de edad en la que se encuentre el paciente para producir conductas específicas.
En el caso de los infantes -que presentan las primeras experiencias de sonambulismo durante la época escolar-, Ulises Jimenez dijo que presentan comportamientos indefensos que desaparecen con el tiempo, por lo que no requieren de un tratamiento médico.
Para evitarlos -agregó el especialista- la madre, el padre o tutor debe procurar incrementar el tiempo y calidad de sueño de la niña o el niño.
“En la infancia los pacientes suelen sentarse o hablar dormidos porque son variantes del sonambulismo, y si tratas de despertarlo no lo lograrás porque está en sueño profundo. Es un periodo en el que se tiene más dificultades para despertar y recobrar la conciencia. Lo mejor es dejar que pase el episodio y que siga dormido”, destacó.
En el caso de los adultos mayor, el catedrático expuso que sus conductas durante el sueño, generalmente, tiene que ver con lo que sueña.
Habitualmente notifican haber soñado con alguna discusión o pelea: “cuando diagnosticamos pacientes con este trastorno es por conducta agresiva, de ataque o defensa”.
Por otro lado destacó que “cuando se presenta el problema en el adulto mayor está relacionado con enfermedades de cerebro degenerativas, como la enfermedad de Párkinson, algunos con demencia o Alzheimer. La conducta en el sueño es un indicador inicial de procesos de degeneración, algo completamente diferente a lo que pasa con los niños”, advirtió.
Fuente: El Universal