¿Qué tan esclavo somos al teléfono móvil?
Sin duda, los avances tecnológicos han permitido el desarrollo de diferentes dispositivos electrónicos que se han convertido en parte de la cotidianidad de millones de personas.
Esto, unido con las restricciones ante la aparición del covid-19, incrementó el uso de computadores, tablets y celulares, los cuales se afianzaron como medios de trabajo y de ocio.
Vale decir que, de todos modos, existen ciertas dificultades en torno a la posible dependencia de estos aparatos electrónicos. De hecho, expertos en el tema se han referido, en reiterados momentos, a las repercusiones que estos objetos podrían tener en la salud.
Juan Camilo Díaz, experto en cultura digital de la Universidad de La Sabana, habló sobre este tema.
“Diferente estudios de uso de dispositivos móviles han mostrado que nos hemos vuelto más dependientes del celular porque es un dispositivo totalmente convergente. Es decir, no solamente nos permite hacer llamadas, sino que también podemos interactuar en redes sociales, revisar el correo electrónico, ver películas o series, escuchar música y hasta jugar videojuegos”, comentó.
Sin embargo, el experto resaltó que la tecnología no es mala o buena sino que depende del uso que se le dé. También habló sobre algunos signos de alarma que pueden indicar que una persona está haciendo un uso excesivo de su celular.
“Estos dispositivos son herramientas y no deberían ser el fin ni el centro de nuestras vidas. La sensación de estar perdiéndonos de algo y, en este contexto, a la necesidad de estar constantemente revisando el celular para no perdernos de algún mensaje, acontecimiento o noticia. Por otro lado, está la nomofobia, que es el miedo a estar sin el celular. Por ejemplo, en países asiáticos ya hay casos de estudio médicos y psicológicos que han mostrado que las personas presentan dolor de cabeza, náuseas, depresión y otros síntomas que, en muchos casos, pueden llegar a ser similares a aquellos que experimentan las personas adictas a una droga”, mencionó.
En concordancia con Díaz, un artículo publicado en la página web de Sanitas menciona que las personas que sufren de nomofobia podrían presentar estos síntomas: mirar constantemente el celular para ver si ha recibido algún mensaje, disminuir las horas de sueño para mirar redes sociales, no querer ir a algún lugar en el que no haya Wifi o cobertura de señal, no apagar el celular en ningún momento y siempre estar pendiente de localizar un enchufe para cargar el celular.
Lina Paola Sorza Rodríguez, profesora del Centro de Tecnologías de la Academia (CTA) de la Universidad de La Sabana, habló sobre otras señales de alarma que se pueden presentar cuando las personas están haciendo un uso excesivo de sus dispositivos móviles.
“Existen señales de alarma en salud física y mental. Respecto a la primera, se pueden manifestar con malas posturas al momento de utilizar el celular, desgaste en la visión por el brillo de la pantallas de los celulares e, incluso, el sobrepeso porque en algunas ocasiones las personas prefieren estar conectadas que ejercitarse. Sobre la segunda, está el ‘phubbing’ (ignorar a las personas alrededor) y el síndrome de Burnout (cuando la persona ya no es tan productiva en el trabajo) y otros signos como la ansiedad y estrés”, puntualizó.